La mayoría de trastornos mentales, mínimo la mitad, sus primeros síntomas comienzan a aparecer en la adolescencia.
Soy Jorge franco. Te voy hablar de salud mental en niños y adolescentes. La infancia y la adolescencia es un período que determina la salud mental de los seres humanos, que determina el futuro de los seres humanos. La salud mental depende de muchos factores: factores genéticos, el ambiente en la infancia y adolescencia, hábitos y estilo de vida, consumo de alcohol, de sustancias psicoactivas, qué tan expuesto estoy, ha habido juegos, qué tanto tengo. hobbies, comparto, socializo, el ambiente del colegio, mi alimentación y muchos otros factores.
La mayoría de trastornos mentales, mínimo la mitad, sus primeros síntomas comienzan a aparecer en la adolescencia y la mayoría de trastornos mentales, lamentablemente, 70% de las personas no buscan ayuda, entonces son problemas que acompañan a la persona gran parte de su vida y los pocos que buscan ayuda, generalmente cuando lo hacen, llevan varios años con su problema.
Entonces, ¿cuándo sospechar o cuáles serían los signos de alarma de que un niño o adolescente esté teniendo problemas de salud mental? Que se vea muy preocupado, estresado, personas muy introvertidas al punto de que les cuesta trabajo adaptarse a las situaciones sociales cotidianas, bajo rendimiento académico o bajar el rendimiento académico, problemas de conducta, de comportamiento, estados de ánimo muy irritables, aislamiento, tristeza, mal genio, consumo de alcohol, consumo de sustancias psicoactivas, una preocupación excesiva por el peso, por la figura corporal, con cambios en el consumo de los alimentos, problemas de concentración, problemas de impulsividad. Estas son las manifestaciones más frecuentes de un problema de salud mental en la infancia y en la adolescencia.
Adicionalmente, son problemas que muchas veces también producen muchos síntomas físicos, por ejemplo, si un niño o adolescente comienza a tener muchos dolores abdominales, que no le encuentra ninguna explicación, muchos problemas de tensión muscular, migraña, colon irritable, bruxismo, vértigo, tinnitus. Toda esta cantidad de síntomas físicos, incluso a lo largo de toda la vida no solo en la infancia y la adolescencia, muchas veces detrás de eso hay un problema de salud mental.
La palabra salud mental, trastorno mental o problema de salud mental se presta para que muchas veces las personas piensen que estos problemas son solamente psicológicos, ganas de llamar la atención, ser consentido. Muchos problemas de salud mental, además del componente psicológico, además del componente ambiental, también tienen un componente genético, biológico, cerebral. Los problemas de salud mental que no se diagnostican y no se interviene tempranamente poco a poco van afectando todas las áreas de la vida de un niño y un adolescente: su autoestima, su capacidad de adaptarse al colegio, al entorno, a las dificultades. Todos los problemas de salud mental afectan la productividad y el rendimiento y un problema, de los diferentes problemas de salud mental, especialmente la depresión, los trastornos de ansiedad, es que contaminan mucho los pensamientos, la manera como el adolescente se ve a sí mismo, como cree que los demás lo ven a él, como lo ve el mundo, como ve la vida; una visión tan distorsionada y contaminada del mundo, trae mucho sufrimiento y trae muchos problemas, también recuerden que la adolescencia es un período crítico donde muchas veces los adolescentes van a estar más expuestos al alcohol, a sustancias psicoactivas, adicciones como el juego, las apuestas. Por eso es tan importante ser conscientes y estar pendientes de la salud mental de nuestros hijos.
La adolescencia y el comienzo de la vida adulta es uno de los períodos donde se incrementan las tasas de suicidio. Detrás de un suicidio o de un intento de suicidio lo que hay es un niño y uno adolescente con un problema de salud mental que no ha sido detectado y que no ha sido atendido oportunamente.
Factores de riesgo: además de la precisión genética, hábitos. Un adolescente, un niño que sea sedentario, que no haga deporte, que consuma muchos azúcares, que fume, que esté expuesto al alcohol, que trasnoche, que no tenga el sueño adecuado, que viva pegado una pantalla y un ambiente familiar donde haya mucha atención, estrés, maltrato, gritos o un adolescente solo, que no tenga apoyo, cuidado, supervisión. Todos esos son factores de riesgo para tener problemas de salud mental.
Factores protectores: (ahí es donde tenemos mucho por hacer) El deporte, tener hobbies, espiritualidad, una buena red de apoyo, una familia presente, un ambiente familiar tranquilo, cálido, donde se perciba el apoyo, el ambiente en el colegio. Todo eso son factores protectores.